Se entiende por abordaje el choque ocasionado entre buques o embarcaciones, incluyendo, aunque no haya contacto, a los posibles daños ocasionados al otro barco como resultado de una maniobra.
Actualmente, la regulación se aplica indistintamente el régimen establecido en el Convenio del 23 de septiembre de 1910 en Bruselas para la unificación de varias reglas en materia de abordaje.
Responsabilidad en caso de abordaje
La Ley establecerá la responsabilidad de los daños ocasionados en un abordaje a la embarcación o buque que sea culpable.
La culpa deberá aprobarse por quien reclama la indemnización.
En caso de que la culpa sea compartida por ambos, la responsabilidad se graduará en función al grado de culpa de cada una de las partes.
Cuando no se pueda dictaminar el grado de culpa, la responsabilidad se dividirá entre ambos de forma equitativa.
Un punto importante a destacar es que cuando intervenga más de un buque y se genera un daño, los culpables responderán solidariamente frente al dañado.
Las reglas que se aplican para determinar la culpabilidad del abordaje son las establecidas por el Reglamento Internacional para Prevenir los Abordajes en la Mar, RIPA.
El convenio establece tanto las normas de paso y maniobra en distintas situaciones de luces y marcas que deberán llevar los buques y embarcaciones.
Formalidades y Reclamación
La denuncia no supone ninguna formalidad, sin embargo, es muy importante que se deje constancia de lo sucedido entre ambos buques.
Todos los buques y embarcaciones están obligados a contar con un seguro de responsabilidad civil, que será el que cubra los daños ocasionados al otro buque por el abordaje.
Esto quiere decir que es un seguro a terceros y no cubrirá el daño ocasionado del barco asegurado si resulta culpable.
Por tanto, se recomienda realizar un parte de forma amistosa detallando los hechos, obteniendo así del informe, el culpable en caso de duda.
Si se diera el caso de que no exista ningún tipo de contacto personal entre las partes, y no se realice un acuerdo amistoso, será imprescindible identificar la bandera y la matrícula de quién nos ha abordado.
Además, son importantes también los datos de posibles testigos que pudieran haber durante el accidente.
Seguro de Responsabilidad civil y acción directa
El seguro cubrirá los daños ocasionados por colisión con o sin contacto entre embarcaciones.
La legislación regula que no es necesario reclamar a la otra embarcación, sino que puede hacerse directamente a su aseguradora.
El problema radicaría en conocer la aseguradora.
Si somos reticentes en dar dicha información y existe un litigio, nuestra aseguradora deberá pagar a la otra parte, y además, podría reclamarnos alguna compensación si nos negamos a colaborar.
Cómo actuar en caso de abordaje
Lo primero será intentar minimizar los posibles daños mayores que se puedan producir y poner a salvo a las personas.
Acto seguido, se evaluarán los daños y las causas y los testigos, en caso de que no se solucione de forma amistosa.
Cuando se resuelva la parte culpable, se evaluarán los costes de las reparaciones.
En caso de que ocurra esto y su aseguradora decida pagar, se enviará un perito que lo evalúe.
No obstante, si no existiera acuerdo, se iniciaría un procedimiento de valoración pericial contradictoria, y si no se llegara a una resolución, se llamaría a un tercer perito.
Por otro lado, si el barco que tiene derecho a percibir la indemnización, cuenta con un seguro de daños propios del armador podría:
- Dar parte a su compañía
- Reclamar al culpable o a su seguro directamente.
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